Las micro, pequeñas y medianas empresas (MIPYMES) son la columna vertebral de la economía global, impulsando la innovación, la creación de empleo y el crecimiento económico.
La brecha de financiamiento para las MIPYMES asciende actualmente a 5.7 billones de dólares, una cifra que se eleva a 8 billones si se incluyen las empresas informales, de las cuales aproximadamente el 34% son propiedad de mujeres. Un panorama económico global incierto y una mayor aversión al riesgo por parte de los prestamistas han restringido aún más el acceso al financiamiento para las pequeñas empresas.
El Grupo del Banco Mundial está intensificando su apoyo a las MIPYMES como generadoras de empleo. La IFC continúa respaldando a las MIPYMES a través de instituciones financieras, pero también está priorizando inversiones en plataformas no tradicionales —como prestamistas digitales y cooperativas agroindustriales— y apoyando tecnologías que faciliten el acceso al financiamiento y la digitalización. Además, la IFC está desarrollando capacidades para invertir directamente en empresas medianas y de alto crecimiento, complementando así su apoyo tradicional a las PYMES.
Las MIPYMES representan más del 90% de todas las empresas y, en promedio, generan el 70% del empleo total y el 50% del PIB mundial.